¿Qué pruebas existen de que los Nazis practicaron el genocidio o asesinaron deliberadamente a seis millones de judíos?
1. ¿Qué pruebas existen de que los Nazis practicaron el genocidio o asesinaron deliberadamente a seis millones de judíos?
El IHR dice (combinando la versión original, la de Samisdat, y la revisada):
Ninguna. La única evidencia son los testimonios de posguerra de "supervivientes" individuales. Estos testimonios son contradictorios, y ningún "superviviente" afirma haber sido testigo de ningún gaseamiento. No hay documentos de la época que lo demuestren ni ninguna prueba tangible: ni montones de cenizas, ni crematorios capaces de eliminar millones de cuerpos, ni pilas de ropa, ni jabón hecho de restos humanos, ni pantallas de lámparas hechas con piel humana, ni registros, ni estadísticas demográficas creíbles.Nizkor responde:
Una mentira tras otra, sin la más mínima prueba.Éste es un punto tan bueno como cualquier otro para comenzar a exponer algunas pruebas detalladas que son ignoradas como base para negar el Holocausto. Hará que esta respuesta sea más larga que las otras sesenta y cinco, pero quizás el lector comprenderá que es necesario.
Echemos un vistazo a las afirmaciones que se hacen una por una:
Suponiendo como única evidencia, "los testimonios de posguerra de supervivientes individuales".
Esta suposición, que pocas veces es expresada claramente, afirma que el genocidio judío nunca tuvo lugar, sino que fue una conspiración de judíos que empezó hacia 1941, y que falsificó miles de documentos para probarlo; después de la guerra, hablaron con los supervivientes de los campos y les indicaron lo que tenían que decir.
Al parecer, los conspiradores también consiguieron torturar a cientos de nazis que estaban en puestos clave durante la guerra, para que confesaran crímenes que nunca cometieron, o para que implicaran a sus compañeros. Asimismo, consiguieron colocar cientos de documentos en los archivos nazis que nunca fueron descubiertos hasta después de la guerra, y muchas veces sólo con mucha suerte. El diario de Goebbels, por ejemplo, fue salvado por los pelos de ser vendido como 7.000 páginas de papel usado, pero en el manuscrito se encuentran algunas entradas como ésta (según la traducción al inglés de Lochner, The Goebbels Diaries, 1948, pp. 86, 147-148):
14 de febrero de 1942: El Führer ha vuelto a expresar su determinación de eliminar sin piedad a los judíos de Europa. Debe desaparecer todo sentimentalismo remilgado. Los judíos son los que han provocado la catástrofe que se les avecina. Su destrucción irá unida a la destrucción de nuestros enemigos. Debemos acelerar este proceso sin piedad.Michael Shermer ha señaladoque las estimaciones de los nazis del número de judíos europeos rondaban los once millones, y el sesenta por cien de once millones son 6,6 millones, algo muy cercano a las cifras reales. (En realidad, el cuarenta por cien es una estimación muy por lo alto de la tasa de supervivencia de los judíos que fueron capturados, pero muchos judíos escaparon).27 de marzo de 1942: El procedimiento es más bien bárbaro, y no lo detallaré aquí. No quedará mucho de los judíos. En cifras generales, se puede decir que alrededor del sesenta por cien de ellos será liquidado, mientras que sólo el cuarenta se salvará para ser utilizado como mano de obra.
En cualquier caso, la mayoría de la información del diario es trivial, y sólo interesa a los historiadores. ¿Creó la supuesta conspiración judía siete mil páginas de un diario simplemente para insertar unas pocas líneas a su favor? ¿Cómo se las arreglaron para conocer la vida de Goebbels tanto como para evitar contradicciones, como por ejemplo situarle a él o a otras personas en la ciudad equivocada el día equivocado?
Tal y como ha admitido incluso el revisionista David Cole, los revisionistas aún tienen que dar una explicación satisfactoria a este documento...
En cuanto a los testimonios de posguerra de los nazis, ¿se torturó a todos y cada uno de ellos para que confesaran horribles crímenes que supuestamente no cometieron? Esto sería creíble si sólo se hubiera capturado a unos pocos nazis después de la guerra, o quizás si algunos se hubieran enfrentado al tribunal que les juzgaba, y hubieran confesado al mundo el intento de manipular sus testimonios. Pero cientos de ellos testificaron sobre el Holocausto, en juicios que van desde 1945 hasta los años '60. (Por ejemplo, ver Böck, Hofmann, Hössler, Klein, Münch, y Stark).
Muchos de estos nazis declararon como testigos y no fueron acusados de ningún crimen. ¿En qué se basa su supuesta manipulación?
Muchos de estos juicios tuvieron lugar en tribunales alemanes ¿Torturaron los alemanes a sus propios compatriotas? Bien, los negadores del Holocausto a veces afirman que los judíos se han infiltrado en el gobierno alemán y lo controlan. Sin embargo, prefieren no hablar mucho de esta teoría, dado que raya en lo lunático.
La cuestión principal es que ni una sola de estas supuestas víctimas de tortura -en cincuenta años, ni una- ha apoyado estas teorías según las cuales se les coaccionó.
Al contrario, a lo largo de los años se han confirmado sus testimonios una y otra vez. ¿Qué coacciones podrían haber llevado al juez Konrad Morgen a testificar los crímenes de los que fue testigo ante el Tribunal de Nuremberg en 1946, donde no se le acusó de ningún crimen? ¿Y para que luego volviera a testificar ante el juicio sobre Auschwitz celebrado en Frankfurt de 1963 a 1965? ¿Cómo se coaccionó al doctor de las SS Johann Kremer para que testificara en su propia defensa en 1947, y, después de haber sido condenado en Polonia y en Alemania, volver a aparecer tras su salida de prisión para testificar en el juicio de Frankfurt? ¿Cómo se coaccionó a Böck, a Hess, a Hölblinger, a Storch y a Wiebeck, todos ellos de las SS, todos ellos testigos en Frankfurt, sin que ninguno de ellos fuera acusado de ningún crimen en aquel juicio?
Los que niegan el Holocausto destacan pequeñas discrepancias en los testimonios para tratar de desacreditarlos. Lo que se pretende es que el lector aceptará estas pequeñas discrepancias como la evidencia de una vasta y todopoderosa conspiración judía. Esto es absurdo.
De hecho, las discrepancias y los pequeños errores en detalles hablan en contra, y no a favor, de la teoría conspiratoria. ¿Por qué los conspiradores habrían dado diferente información a diferentes nazis? De hecho, si todos los testimonios, tanto los de los nazis como los de los prisioneros, fueran demasiado parecidos, no hay duda de que los que niegan el Holocausto lo considerarían una evidencia de la conspiración.
¿Qué coacciones podrían perdurar durante cuatro décadas para forzar al antiguo SS-Untersturmführer Dr. Hans Münch a conceder una entrevista, contra la voluntad de su familia, a la televisión sueca? En la entrevista de 1981, habló de Auschwitz:
Entrevistador: ¿No es contrario a los valores éticos de un médico el concepto de exterminio?¿Qué coacciones podrían perdurar durante cuatro décadas para forzar al antiguo SS-Unterscharführer (Cabo de las SS) Franz Suchomel a conceder una entrevista para la película Shoah? Hablando bajo (falsas) promesas de anonimato, habló de los crímenes cometidos en el campo de exterminio de Treblinka (del libro Shoah, Claude Lanzmann, 1985, p. 54):Münch: Sí, sin duda. Es indiscutible. Pero vivía en ese entorno, y traté por todos los medios evitar aceptarlo, pero tuve que vivir con ello. ¿Qué otra cosa podía hacer? Y no me enfrenté a ello directamente hasta que se nos ordenó, a mi, a mi superior, y a otra persona, tomar parte en el exterminio, dado que los doctores del campo estaban saturados de trabajo.
Entrevistador: Debo preguntarle algo. Los que dudan sobre la autenticidad del Holocausto argumentan que "tratamiento especial" podría significar cualquier cosa. No tenía por qué tratarse de exterminio.
Münch: El "tratamiento especial", en la terminología de los campos de concentración, se refería al exterminio físico. Si se trataba de algo más que un pequeño grupo de personas, donde lo mejor que se podía hacer era gasearlos, se les gaseaba.
Entrevistador: ¿El "tratamiento especial" se refería al gaseamiento?
Münch: Sí, sin ninguna duda.
Entrevistador: Usted es un importante testigo, y puede explicarnos lo que fue Treblinka.Pregúntele a los que niegan el Holocausto por qué desestiman el testimonio de Franz Suchomel. Greg Raven le dirá que "no es una prueba... déme una prueba, por favor". Otros le dirán que Suchomel y Münch estaban locos, o que alucinan, o que son fantasías.Suchomel: Pero no utilice mi nombre.
Entrevistador: No lo usaré, se lo prometo. Muy bien, cuando usted llegó a Treblinka...
Suchomel: ...el sargento Stadie nos enseñó todo el campo. Durante el recorrido, pasamos por las cámaras de gas cuando las abrían, y vimos a gente caer como sacos de patatas. Lógicamente, esto nos aterró e impactó. Nos dimos la vuelta, nos sentamos sobre nuestras maletas y lloramos como ancianas.
Cada día se escogía a un centenar de judíos para que llevaran los cadáveres a las fosas comunes. Al atardecer, los ucranianos llevaban a estos judíos a las cámaras de gas, o les pegaban un tiro. ¡Todos los días!
Pero donde están las fantasías es en las mentes de los que prefieren obviar la enorme cantidad de pruebas, y creen en cambio en una hipotética conspiración, apoyada nada más que por su imaginación.
Esta total falta de pruebas es lo que hace que la "suposición de la conspiración" casi nunca aparezca por escrito. Que nosotros sepamos, no existe ni un solo documento revisionista, artículo, discurso, panfleto, libro, cinta, cinta de vídeo o boletín que proporcione detalles sobre esta supuesta conspiración judía o sionista que hizo todo el trabajo sucio. Ni uno.
Como mucho, la literatura negadora hace veladas referencias al Congreso Judío Mundial como el perpetuador de un "engaño" (en Butz, 1976) - pero sin aportar detalles. Y toda la negación del Holocausto se apoya en esta supuesta conspiración.
En cuanto a los testimonios de los supervivientes, que según los "revisionistas" son la única evidencia, en ellos hay multitud de referencias a gaseamientos y otras atrocidades, relatadas por prisioneros judíos que sobrevivieron a los campos y por otras clases de prisioneros, como prisioneros de guerra. Muchos de los prisioneros de guerra que testificaron sobre los gaseamientos no son judíos, por supuesto. Echemos un vistazo, por ejemplo, al testimonio del oficial polaco Zenon Rozansky sobre el primer gaseamiento en Auschwitz, en el que se asesinó a 850 prisioneros de guerra rusos (Reitlinger, The Final Solution, p. 154):
Los que estaban contra la puerta tenían una extraña rigidez, y entonces cayeron a nuestros pies, golpeándose la cara contra el suelo de cemento. ¡Cadáveres! Cadáveres que se mantenían erguidos llenando todo el bunker, ya que estaban tan apretados que no podían caerse.¿Qué "revisionistas" negarán esto? ¿Quién de ellos estuvo allí? ¿Quiénes tienen autoridad para decirle a Rozansky lo que vio o lo que no vio?
La frase "ningún 'superviviente' afirma haber sido testigo de un gaseamiento" es claramente falsa; en las últimas versiones, se ha cambiado "ningún superviviente" por "unos pocos supervivientes", algo un poco más cercano a la verdad.
Pero no hace falta limitarse sólamente a los testimonios de los supervivientes, de los nazis, o de cualquier otra persona. Muchos documentos elaborados durante la guerra, no descripciones de posguerra, que hablan específicamente de gaseamientos y otras atrocidades, fueron capturados por el ejército americano. La mayoría están en los Archivos Nacionales de Washington, D.C.; algunos otros están en Alemania.
Por ejemplo, aquí tenemos un documento secreto enviado al SS Obersturmbannführer (Teniente Coronel de las SS) Rauff por el SS Untersturmführer Becker sobre los furgones de gaseamiento, los precursores de las cámaras de gas (de Nazi Conspiracy and Aggression, 1946, Vol. I, pp. 999-1001):
Si ha llovido por ejemplo durante media hora, no se puede usar el furgón porque patina. Sólo puede usarse cuando no llueve. La pregunta ahora es si puede usarse el furgón permaneciendo parado en el lugar de la ejecución. Pero primero el furgón tiene que llegar al sitio, y eso sólo puede hacerlo si no llueve...Rauff recibió otro informe sobre los furgones de gaseamiento el 5 de junio de 1942, siendo este informe clasificado como "secreto" y "copia única". Es una horrible muestra de los eufemismos nazis, ya que se refiere a los asesinatos como "el procesamiento" y a las víctimas como "los sujetos" y "la carga". (Ver Kogon, Nazi Mass Murder, 1993, pp. 228-235.):Normalmente, el gas no se aplica correctamente. Para acabar lo más rápido posible, el conductor pisa el acelerador a fondo. Haciendo esto, las personas mueren por asfixia sin desmayarse, y no es lo que se había planeado. Las medidas que he tomado demuestran que un correcto ajuste del acelerador hace que la muerte sea más rápida y que los prisioneros mueran pacíficamente desmayados.
Desde diciembre de 1941, por ejemplo, se procesó a 97.000 usando tres furgones, sin que los vehículos sufrieran averías...Hay ciertos deslices en correspondencia escrita sobre las cámaras de gas, y algunas de estas cartas, por suerte, se libraron de ser destruidas y se las recuperó después de la guerra. Un informe escrito por el SS Karl Bischoff el 27 de noviembre de 1942 describe la cámara de gas de Krema II no con el habitual término "Leichenkeller", sino con "Sonderkeller", "sótano especial".La capacidad de los furgones es de nueve a diez por metro cuadrado. La mayor capacidad de los furgones especiales Saurer no es una ventaja. Aunque no sufren exceso de carga, pierden mucha maniobrabilidad fuera de los caminos y carreteras sobre cualquier terreno. Sería deseable una reducción en la capacidad de carga. Se puede hacer reduciendo un metro el tamaño del furgón. La dificultad mencionada no puede solucionarse reduciendo la carga, como se ha hecho hasta ahora. Esta reducción requiere un mayor tiempo de operación, dado que hay que llenar el espacio vacío con CO [el gas emitido por el tubo de escape utilizado para asfixiar a las víctimas].
Es necesario proteger mejor las luces. La rejilla debería cubrir los faros lo suficiente como para hacer imposible que se rompan las bombillas. Parece que rara vez se encienden los faros, por lo que los usuarios dicen que pueden suprimirse. Pero la experiencia demuestra que cuando se cierra la puerta trasera y el interior se vuelve oscuro, la carga se aprieta contra la puerta. El motivo es que cuando el interior se vuelve oscuro, la carga se arroja hacia el menor resquicio de luz. Esto dificulta el cierre de la puerta. También se ha señalado que el ruido provocado por el cierre de la puerta se une al miedo producido por la oscuridad.
Y dos meses después, el 29 de enero de 1943, Bischoff escribió un informe para Kammler, refiriéndose a esa misma cámara de gas como "Vergasungskeller". (Ver Gutman, Anatomy of the Auschwitz Death Camp, 1994, pp. 223, 227.) "Vergasungskeller" significa literalmente "sótano de gaseamiento", una cámara de gas subterránea.
Los negadores del Holocausto recurren a Arthur Butz, que da una engañosa explicación del término: "Vergasunsg", dice, no puede referirse a asesinar personas con gas, sino sólo al proceso de convertir un sólido o líquido en gas. Así, dice que "Vergasungkeller" debía ser una habitación especial en la que el combustible para los hornos de Auschwitz era transformado en gas - una "cámara de gasificación".
Hay tres problemas en esta explicación. En primer lugar, "Vergasung" ciertamente puede referirse a asesinar personas con gas; Butz no habla alemán, así que no debería hacer especulaciones con el idioma. En segundo lugar, no existe una habitación que pudiera realizar la función que Butz describe - años después de escribir su libro, admitió esto, e inútilmente trató de sugerir que puede ser que hubiera otro edificio en alguna parte que albergara la cámara de gasificación. En tercer lugar, el tipo de horno usado en Auschwitz no requería ningún proceso de gasificación. Los hornos empleaban combustible sólido. (Ver Gutman, op. cit., pp. 184-193.)
Así que, ¿a qué se refiere el término "sótano de gaseamiento"? Los negadores del Holocausto aún tienen que ofrecer una explicación creíble.
Un inventario de material, capturado tras la guerra, reveló la existencia de catorce alcachofas de ducha y una puerta estanca en la cámara de gas de Krema III. Los negadores dicen que esta sala era una morgue; pero no explican para qué podía usarse en una morgue catorce alcachofas de ducha y una puerta estanca. ( Ver fotografía del documento, o Pressac, Auschwitz: Technique and Operation, 1989, pp. 231, 438.)
Un informe de la oficina de obras de Auschwitz, fechado a 31 de marzo de 1943, dice (Hilberg, Documents of Destruction, 1971, pp. 207-208):
Aprovechamos para mencionar otro pedido del 6 de marzo de 1943 de una puerta estanca 100/192 para la Leichenkeller 1 de Krema III, Bw 30a, que debe instalarse siguiendo el procedimiento y medidas de la puerta de sótano del Krema II, con una escotilla con cristal doble de 8 milímetros enmarcada con goma. Este pedido ha de ser considerado urgente...¿Para qué necesitaría urgentemente una morgue escotillas con un grueso cristal doble de 8 milímetros?
La cuestión referente a si puede demostrarse el uso de gas ciánido (cianuro en estado gaseoso) en las cámaras de Auschwitz es algo que intriga a los negadores. Su tan anunciado Informe Leuchter, por ejemplo, dedica grandes esfuerzos a preguntarse si quedan restos de ciánido allí hoy en día. Pero no necesitamos buscar trazas químicas para confirmar el uso de ciánido (Gutman, op. cit., p. 229):
Varias cartas y telegramas intercambiadas entre el 11 y el 12 de febrero[de 1943] entre el Zentralbauleitung y Topf mencionan el pedido de un ventilador de madera para la Leichenkeller 1. Esta referencia confirma el uso de la morgue como cámara de gas: Bischoff y Prüfer consideraban que la extracción de aire mezclado con ácido prúsico concentrado [cianuro disuelto en agua] (20 gr/cm3) requería un ventilador que no pudiera corroerse.En realidad, Bischoff y Prüfer se equivocaban, y se acabó usando aceptablemente bien un ventilador metálico. Pero el hecho de que pensaran que era necesario demuestra que el cianuro era habitualmente empleado en las salas que los negadores llaman morgues. (El cianuro no sirve como desinfectante en una morgue, ya que no elimina bacterias).
Otros documentos capturados, incluso aunque no se refieran directamente a alguna parte del proceso de exterminio, se refieren a él por las consecuencias de éste. Un informe capturado del SS-Brigadeführer (General de Brigada de las SS) Kammler revela que la capacidad de incineración prevista de los hornos de Auschwitz era de un total de 4.756 cadáveres al día (ver fotografía del documento o Kogon, op. cit., p. 157).
Los negadores suelen decir que todo esto no era realizable en la práctica (ver pregunta 45). No es correcto. Estos crematorios fueron diseñados cuidadosamente en 1942 para tener una capacidad de eliminación de cuerpos de 140.000 al mes - en un campo en el que sólo había 125.000 personas. Podemos concluir que el exterminio masivo fue predicho, incluso planificado, ya a mediados de 1942. Un campo diseñado para incinerar a toda su población de prisioneros cada cuatro semanas no es un simple centro de detención.
Finalmente, aparte de los abundantes testimonios, confesiones, y evidencias físicas del proceso de exterminio, ciertamente no hay necesidad de rebuscar pruebas sobre las intenciones y planes de los nazis.
Aquí tenemos unos pocos ejemplos. Del diario de Hans Frank (de Nazi Conspiracy and Aggression, 1946, Vol. I, pp. 992, 994):
Pero, ¿qué se debería hacer con los judíos? ¿Creen que se les reasentará en el 'Ostland' [territorios del este], en poblados [de reasentamiento]? Esto es lo que se nos dijo en Berlín: ¿por qué tantas molestias? No podemos hacer nada con ellos ni en el 'Ostland' ni en el 'Reichkommissariat'. Así que liquídenlos.El discurso de Himmler en Posen del 4 de octubre de 1943 fue grabado en cinta (Trial of the Major War Criminals, 1948, Vol. XXIX, p. 145):Caballeros, debo pedirles que abandonen todos sus sentimientos de piedad. Debemos aniquilar a los judíos, dondequiera que les hallemos y en cualquier momento en el que podamos, para así mantener la estructura del Reich como un todo...
No podemos disparar o envenenar a esos 3,500.000 judíos, pero sin duda seremos capaces de tomar medidas que llevarán, de una manera u otra, a su aniquilación...
Sentenciar a 1,200.000 judíos a morir de hambre es algo que sólo se notaría un poco.
Me referiré ahora a la evacuación de los judíos, el exterminio del pueblo judío. Ésta es una de esas cosas que se dicen fácilmente: "se está exterminando a los judíos", dicen todos los miembros del partido, "muy cierto, es parte de nuestros planes, la eliminación de los judíos, su exterminio, lo estamos haciendo".El trabajo de exterminio fue incluso mencionado en al menos un veredicto oficial de un tribunal nazi. En mayo de 1943, un tribunal de Münich declaró en su sentencia contra el SS-Untersturmführer Max Taubner que:
No se debería castigar al acusado en razón a las acciones cometidas contra los judíos como tales. Los judíos han de ser exterminados y ninguno de los judíos muertos es una gran pérdida. Aunque el acusado debería haberse dado cuenta de que el exterminio de judíos es la misión de los Kommandos que se crearon especialmente para ello, se le debería excusar que se considerara a si mismo con la autoridad necesaria para tomar parte en el exterminio.Y Hitler habló claramente de ello en público al menos en tres ocasiones. El 30 de enero de 1939, siete meses antes de que Alemania invadiera Polonia, dio un discurso en el Reichstag (transcrito de la revista Skeptic, Vol. 2, No. 4, p. 50):
Hoy quiero volver a convertirme en profeta: si la banca judía internacional de Europa y de fuera de ella tiene éxito una vez más en su intención de llevar a las naciones a otra guerra mundial, la consecuencia no será la bolchevización de la Tierra y así, la victoria de los judíos, sino la aniquilación de la raza judía en Europa.Por cierto, esta última frase, en alemán es "die Vernichtung der jüdischen Rasse in Europa". Los que hablen alemán se darán cuenta de que no es en absoluto ambigua.
En septiembre de 1942:
...si los judíos conspiran para provocar otra guerra mundial para exterminar a los arios de Europa, no deberían ser los arios los exterminados, sino los judíos...El 8 de noviembre de 1942:
Recordarán la sesión del Reichstag en la que declaré: si los judíos se imaginan que podrán provocar una guerra mundial para exterminar a las razas europeas, el resultado no será el exterminio de las razas europeas, sino el exterminio de los judíos de Europa. La gente siempre se rió de mi cuando profetizaba. De aquellos que se rieron entonces, un incontable número ya no se ríe hoy, y los que aún se ríen, quizás se reirán sólo durante un pequeño tiempo.Hay muchos otros ejemplos de documentos y testimonios que podrían presentarse.
Hay que tener en cuenta que la respuesta del IHRa "¿qué pruebas existen?" es "ninguna". Se ha demostrado claramente ya que esta fácil respuesta es un fraude. Y ésta es la clave de lo que queremos expresar: la negación del Holocausto es un fraude.
Seguiremos ahora analizando el resto de
afirmaciones, más específicas, sobre las que se supone que
no hay pruebas.
(Al parecer, algunos supervivientes afirman que los cadáveres no eran incinerados por completo. Dado que se mezclaban restos no incinerados con las cenizas, el editor sugirió que los testimonios eran falsos. Sorprendentemente, no hace ningún comentario sobre cómo llegó hasta allí una capa de seis metros de cenizas humanas. Quizás consideró que no merecía la pena tenerlo en cuenta).
También se han encontrado
montones de cenizas en Maidanek.
En Auschwitz-Birkenau, se
arrojaron las cenizas de los cadáveres en los ríos y pantanos
que rodeaban el campo, y se usaron como abono en los campos de granjas
cercanas.
Quizás los autores del 66 Q&A se dieron cuenta de que era peligroso para ellos admitir que esas pilas eran pruebas tangibles, porque entonces se verían obligados a admitir que otras cosas son "pruebas tangibles". Quizás es por eso por lo que quitaron esa frase de la edición revisada del 66 Q&A.
Si no se encontraron
con frecuencia objetos en cantidades masivas, es porque los nazis los repartían
entre la población alemana. Se capturó un informe
sobre este asunto, revelando que incluso se repartió ropa interior
femenina.
Alemania | 195.000 |
Austria | 53.000 |
Checoslovaquia | 255.000 |
Dinamarca | 1.500 |
Francia | 140.000 |
Bélgica | 57.000 |
Luxemburgo | 3.000 |
Noruega | 1.000 |
Holanda | 120.000 |
Italia | 20.000 |
Yugoslavia | 64.000 |
Grecia | 64.000 |
Bulgaria | 5.000 |
Rumanía | 530.000 |
Hungría | 200.000 |
Polonia | 3,271.000 |
URSS | 1,050.000 |
Restando los refugiados en distintos países... | (308.000) |
Total de judíos asesinados | 5,721.500 |
Algunas estimaciones dan cifras más bajas, otras dan cifras más altas, pero es una cuestión de cifras, no del hecho. En un artículo del periódico de los estudiantes de la CMU, se cita al jefe del departamento de Historia de la CMU, Peter Stearns, afirmando que documentos recientemente descubiertos -especialmente en la antigua Unión Soviética- indican que el número de víctimas supera los seis millones. Otros historiadores consideran que no supera demasiado los cinco millones. Encyclopedia of the Holocaust usa la cifra de 5,596.000 como mínimo y 5,860,000 como máximo (Gutman, 1990, p. 1799).
En resumen:
Los "revisionistas" con frecuencia afirman correctamente que el peso de las pruebas corresponde a los historiadores. Las pruebas, por supuesto, ha sido públicas desde finales de 1945, y se pueden leer en bibliotecas de todo el mundo. Estas pruebas se han analizado muchísimas veces. Simplemente hemos mostrado una pequeña parte de algunos de los puntos principales del inmenso conjunto de pruebas; hay muchas más disponibles.
El mero hecho de plantearse que el Holocausto nunca ocurrió es absurdo. Afirmar seriamente que no existe la más mínima prueba está más allá del absurdo, y es un claro ejemplo de las retorcidas intenciones del "revisionismo".