[an error occurred while processing this directive]

Estudio del Contenido de Componentes de Cianuro en los Muros de las Cámaras de Gas de los Antiguos Campos de Concentración de Auschwitz y Birkenau


Metodología: Primera Parte

Las muestras, de entre 1 y 2 gramos de peso, se tomaron partiendo pedazos de ladrillos y cemento, o raspando, esto último sobre todo en el caso del yeso y la argamasa. Los materiales muestreados fueron introducidos en contenedores de plástico marcados con números de serie. Todas estas actividades fueron registradas y documentadas con fotografías. El trabajo relacionado con ellas llevó a la comisión dos días. Los análisis de laboratorio de las muestras fueron realizados, para asegurar una total objetividad, por otro grupo de trabajadores del Instituto. Comenzaron con trabajos preliminares: las muestras fueron pulverizadas empleando un mortero de mano, y se determinó su pH, entre 6 y 7 en casi todas las muestras. A continuación, se realizaron análisis espectrométricos preliminares en la región del infrarrojo, empleando para ello un espectrómetro Digilab FTS-16.  Se halló que las bandas de los grupos cianuro aparecieron en la región 2000-2200 cm-1 en los espectros de una docena de muestras. Sin embargo, el método no parecía ser lo suficientemente sensible, y se recurrió a determinaciones cuantitativas. Usando el método espectrográfico se pudo determinar que los principales elementos de las muestras eran: calcio, silicio, magnesio, aluminio e hierro. Se encontró además titanio en muchas de las muestras. También aparecieron en algunas muestras otros metales, entre ellos bario, zinc, sodio, manganeso... y del grupo de los no metales, el boro.

La realización de análisis químicos tenía que ir precedida de cuidadosas consideraciones. Los revisionistas centraron su atención casi exclusivamente en el azul de Prusia, que es de un color azul oscuro intenso que es muy resistente. Este tinte aparece, especialmente en forma de manchas, en los ladrillos exteriores de los muros del antiguo edificio de despiojado del área del campo de Birkenau. Es difícil imaginar las reacciones químicas y procesos fisicoquímicos que pudieron llevar a la formación del azul de Prusia en ese lugar. Los ladrillos, a diferencia de otros materiales de construcción, absorben con dificultad el cianuro de hidrógeno, y a veces no lo absorben en absoluto. Además, el hierro que hay en ellos está en el tercer estado de oxidación, mientras que el hierro (II) es indispensable para la formación del ión [Fe(CN)6]-4, que es el precursor del azul de Prusia. Este ión es, además, sensible a la luz solar.

J. Bailer <1> escribe en su trabajo "Amoklauf gegen die Wirklichkeit" que la formación del azul de Prusia en ladrillos es simplemente improbable; sin embargo, tiene en consideración la posibilidad de que los muros de la sala de despiojado estuvieran pintados con una pintura que contuviera este tinte. Se debería añadir que esta coloración azul no aparece en los muros de todas las cámaras de despiojado.

Decidimos determinar la presencia de iones cianuro usando un método que no indujera la ruptura del complejo de cianuro de hierro (el azul del que hablamos) y que habíamos probado antes en una muestra estándar apropiada. Para aislar los compuestos de cianuro de los materiales examinados en forma de cianuro de hidrógeno usamos técnicas de microdifusión, en especial cámaras del tipo Conway. Se colocó la muestra a examinar en la parte interna de la cámara y a continuación se acidificó con una disolución de ácido sulfúrico al 10%, permitiéndo que permaneciera a temperatura ambiente (unos 20 ºC) durante 24 horas. El cianuro de hidrógeno separado pasó por una absorción cuantitativa por parte de la disolución de lejía presente en la parte externa de la cámara. Cuando terminó la difusión, se tomó una muestra de la disolución de lejía y se llevó a cabo la reacción piridina-pirazolona empleando el método de Epstein.<3> Se midió espectrométricamente la intensidad del tinte de polimetano obtenido a una longitud de onda de 630 nm. Previamente se construyó la curva de calibración y se introdujeron muestras con un contenido conocido de CN- en cada serie de determinaciones para comprobar la curva y el curso de determinación. Cada muestra de materiales examinada fue analizada tres veces. Si el resultado obtenido era positivo, era verificado repitiendo el análisis. Habiendo aplicado este método durante muchos años, podemos asegurar su alta sensibilidad, especificidad y precisión. En las circunstancias presentes, establecimos el límite inferior de determinación de iones cianuro en 3-4 µg de CN- por kg de muestra.

Los resultados de los análisis figuran en las Tablas I a IV. Muestran sin ninguna duda que aparecen compuestos de cianuro en todas las instalaciones que, de acuerdo con los datos de las fuentes, estuvieron en contacto con él. Por otro lado, no aparecen en las viviendas, algo demostrado por las muestras de control. Las concentraciones de compuestos de cianuro en las muestras tomadas en un mismo edificio o cámara mostraban grandes diferencias entre ellas. Esto indica que las condiciones que favorecen la formación de compuestos estables como resultado de la reacción del cianuro de hidrógeno con los componentes de los muros se dan localmente.  Hace falta un gran número de muestras de una instalación para que tengamos alguna posibilidad de descubrir esta clase de acumulación local de compuestos de cianuro.


Versión original texto de este archivo por ftp.

[ Índice ]

[an error occurred while processing this directive]